Seguimiento y vigilancia de las obligaciones de la SPV
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La gestión de una sociedad vehículo (SPV) va mucho más allá de la supervisión técnica o financiera del activo. Supone garantizar, día a día, que la sociedad cumple con un entramado de obligaciones mercantiles, fiscales, contractuales y regulatorias.
En Abalados asumimos ese papel de vigilancia y control continuo, actuando como garante del cumplimiento y como enlace entre la SPV, los financiadores, los auditores y las administraciones públicas.
La experiencia nos demuestra que muchos riesgos no provienen de fallos técnicos, sino de omisiones administrativas o incumplimientos documentales: un contrato sin renovar, un seguro vencido o una obligación informativa no atendida.
Nuestro servicio nace para evitar esos desajustes, mantener actualizada toda la documentación del activo y anticipar cualquier posible incidencia.
Control integral y continuo
Cada SPV dispone de un mapa de obligaciones personalizado, que abarca desde los compromisos con los bancos hasta los plazos mercantiles o fiscales. Ese mapa se revisa de forma periódica y se actualiza ante cualquier cambio regulatorio o contractual.
Entre los aspectos que supervisamos destacan:
Renovación y depósito de cuentas anuales, poderes y documentación societaria.
Cumplimiento del calendario fiscal y coordinación de declaraciones.
Control de seguros, licencias, garantías y contratos de mantenimiento o PPA.
Seguimiento de condiciones de financiación y covenants exigidos por entidades bancarias.
Comunicación y coordinación con auditores, O&M, representantes de mercado y organismos públicos.
Herramientas y metodología
Combinamos el trabajo especializado de nuestro equipo con herramientas digitales de seguimiento, que permiten mantener una trazabilidad documental completa. Cada hito o requisito cuenta con su responsable, su fecha límite y su evidencia asociada.
Además, el sistema genera alertas automáticas y reportes de cumplimiento que se integran en el reporting financiero y operativo del activo, de modo que la información técnica, contable y jurídica permanece alineada en todo momento.
Nuestro enfoque no busca solo evitar incumplimientos, sino reforzar la estabilidad y la confianza en el funcionamiento de la SPV. Un seguimiento riguroso facilita la relación con bancos y auditores, reduce los tiempos de revisión y aporta una visión clara de la situación del activo.
